Actualidad Diocesana

Pesar en Rancagua por fallecimiento del padre Manuel Bahl

Domingo 10 de Abril del 2022
Reconocido sacerdote partió esta madrugada al encuentro con el Padre

A las 4.30 de la madrugada de este Domingo 10 de abril partió a la Casa del padre el sacerdote Manuel Bahl, según informó la Congregación Verbo Divino a la que perteneció. Mañana lunes se efectuará una misa de cuerpo presente en la comunidad de Espíritu Santo (pobl. Manzanal de Rancagua)

La noticia se conoció desde muy temprano en la diócesis, generado muestras de pesar y de reconocimiento a este sacerdote que dejó una profunda marca por su compromiso con la gente más humilde.

 

Su vida

El padre Manuel Bahl nació el 27 de junio de 1931 en San Miguel Arcángel, Argentina. Ingresó a la congregación Verbo Divino en Buenos Aires, donde se formó como sacerdote. En 1958 fue enviado a Chile, sirviendo en Santiago y Osorno.

El 20 de septiembre de 1968, a los 37 años, asumió funciones en la parroquia San José Obrero de La Granja en Rancagua, parroquia erigida el 19 de octubre de ese año, desmembrándola de la P. El Sagrario. En esta comunidad, el sacerdote estuvo por cerca de 30 años. En sus inicios las condiciones eran precarias: no había luminarias y sus calles eran polvorientas, además de encontrar personas con muchas carencias materiales.

Frente a esa realidad, el padre se acercó a la comunidad no sólo en un plano espiritual, sino que también -al ir creando fuertes lazos con los pobladores- pudo participar activamente en la urbanización y construcción de la población. Sería este nuevo trato con los más pobres el que le preparó el terreno para comenzar su trabajo evangelizador.

Al mismo tiempo, el padre Manuel fue formador de diversas comunidades parroquiales, entre ellas, en Población Dintrans (Sagrado Corazón de Jesús), Óscar Bonilla, Rancagua Sur (Verbo Divino), Isabel Riquelme, Centenario, Manzanal (Espíritu Santo), Las Rozas y Santa Julia, Siete Puentes y Lo Conty, donde pobladores, colegios y juntas de vecinos dan testimonio de sus notables servicios prestados a la comunidad.

En 1998 el Padre Manuel fue trasladado a Santiago, al Seminario de la Congregación. 

Su partida deja una huella imborrable, pues se le reconocen todos los años en que trabajó en beneficio de los más pobres y marginados. Estos hechos fundamentaron la iniciativa de concederle la nacionalidad por especial gracia en el año 1997; y recibir este año la Medalla Santa Cruz de Triana, entregada por la Municipalidad dé Rancagua.