Monseñor, ¿De qué se trata la encíclica del papa Francisco “Laudato Si” que esta semana fue difundida?
El jueves 18 de junio el Papa Francisco entregó una carta encíclica, un documento de la más alta importancia que emite un Papa a nivel mundial, titulado “Laudato Si”, que es la expresión del cántico de las creaturas con que San Francisco en su época alababa a Dios por su creación. “Laudato Si”, significa alabado seas mi Señor por toda la creación. El Papa habla en esta carta del medio ambiente, de la ecología y se hace una pregunta general: ¿Qué tipo de mundo queremos dejar a quienes nos sucedan, a los niños que están creciendo? Esta pregunta está en el centro de esta carta encíclica tan esperada y se refiere al cuidado de la casa común, que es nuestra tierra, nuestro mundo. El dice textual “esta pregunta no afecta solamente al ambiente de forma aislada, porque no se puede plantear de forma fragmentaria”, y se hace varias preguntas, como: ¿Para qué pasamos por este mundo?, ¿Para qué venimos a esta vida?, ¿Para qué trabajamos y luchamos?, ¿Para qué nos necesita esta tierra?, y termina diciendo en la introducción “si no nos planteamos estas preguntas de fondo, no creo que nuestras preocupaciones ecológicas puedan tener resultados importantes”. Personalmente creo que este documento va a tener una gran transcendencia en nuestro mundo. En nuestra diócesis estamos pensando en el mes agosto hacer un foro panel sobre el contenido de esta encíclica con actores relevantes. Desde ya, invito a la comunidad cristiana y a las personas de buena voluntad que acudan a los sitios del vaticano o iglesia.cl para procurar leer, reflexionar y estudiar y, con la gracia de Dios, actuar en consecuencia con estas grandes orientaciones de tipo ecológico que nos presenta el papa Francisco.
Monseñor, a partir de esta encíclica ¿Qué acciones realizará nuestra diócesis?
Esperamos en unión con el Consejo Diocesano de Laicos, organización post sinodal, que agrupa a todos los laicos de la diócesis y con la Comisión Justicia y Paz, que tiene más de cinco años de existencia, generar acciones muy concretas desde el mes de julio, pero especialmente en el mes de agosto, Mes de la Solidaridad, pero, desde ya, invito a la comunidad a estar atento a las próximas informaciones que haremos al respecto para profundizar el contenido de esta carta encíclica acerca del medio ambiente y la ecología y actuar en consecuencia. Por lo que he podido leer, no íntegramente todavía el texto, se trata de un documento profundamente renovador, inspirador, y creo que es deber de todas las personas de buena voluntad, leerlo, analizarlo, estudiarlo cada uno en la medida de sus posibilidades para ponerlo en práctica.