En el día de la festividad del Corazón Inmaculado de María, tres monjes trapenses celebraron su 50 aniversario de ordenación sacerdotal: hermano P. Félix Donahue (Novo Mundo, Brasil), P. Lino Doerner y P.Joel Melvín. Una fiesta de fe, que traspasó la fuerte lluvia de ese día para dejar pasar algunos rayos de sol que iluminaron con majestuosidad la Iglesia del Monasterio Santa María de Miraflores de nuestra diócesis.
La misa de acción de gracias por este aniversario, fue presidida por el Obispo de Rancagua, monseñor Alejandro Goci Karmelic, quien manifestó que “esta es una gran fiesta, porque en un mundo donde no siempre la fidelidad es un valor, que estos tres hombres generosos, inteligentes, vuelven a renovar el SI que dieron hace 50 años es una gracia de Dios muy grande”.
Recalcó que “estamos muy felices, para nosotros el monasterio de Miraflores de los trapenses es un don muy grande, porque aquí uno descubre que Dios es lo primero. Y quizás el problema del mundo actual es ese, que ha olvidado a Dios, aquí Dios está presente en todo lo que se reza, se trabaja y se hace, por eso un gran momento de gozo para toda la diócesis esta celebración”.