Monseñor, ¿Cuál es la importancia de convocar a los jóvenes en una Jornada Mundial?
Fue el Papa Juan Pablo II, hoy Santo, quien durante su Pontificado creó esta institucionalidad de la Jornada Mundial de la Juventud y, posteriormente, la continúo el Papa Benedicto y hoy el Papa Francisco, quien realizó hace dos años una jornada en Brasil y ahora será en Cracovia. Creo que los últimos tres Papas han entendido la trascendencia y la importancia del mundo juvenil en la Iglesia y en la sociedad. Por eso estas jornadas son encuentro de miles y miles de jóvenes de todos los países del mundo que acuden al lugar convocado para manifestar su fe y recibir las orientaciones del Papa y de toda la Iglesia; para luego volver a sus países y tratar de servir a una pastoral de jóvenes activa, entusiasmante, que coloca a Jesucristo en el centro de sus vidas. Creo que es un acierto pastoral inmenso que el Papa Juan Pablo creó en su oportunidad y que los últimos Pontífices, incluido el actual, han continuado.
Monseñor, ¿Cuáles son los desafíos de la Pastoral Juvenil diocesana?
Bueno, son los mismos de siempre: Cómo evangelizar a los jóvenes. Sabemos que hoy el mundo juvenil vive una revolución cultural muy grande, con elementos muy positivos, pero también con situaciones que no son fáciles de enfrentar. Entonces la Pastoral Juvenil tiene el desafío de cómo anuncia a Jesucristo a los jóvenes de hoy y, sin duda, tiene que hacerlo con métodos y pedagogías especiales y, en ese sentido la Jornada Mundial de la Juventud nos dará algunas pistas. Hay un grupo de jóvenes no muy grande, especialmente del Colegio Los Cipreses, de Lo Miranda, que va a estar presente en la Jornada en Cracovia gracias al esfuerzo que han realizado ellos con sus padres. El jueves 7 de julio celebraremos una Eucaristía de Envío a esta misión. Lo importante es que ésta sea una peregrinación y que los jóvenes de nuestra diócesis tengan la capacidad, con sus asesores, de buscar esos caminos innovadores para entusiasmar a los jóvenes en el seguimiento de Jesús y del Evangelio. Jesús es siempre actual, el Evangelio es permanente novedad, el punto es cómo en el contexto actual, con todas las redes sociales, somos capaces de encantar a los jóvenes en el proyecto del Evangelio de Jesús y de su Reino, ese es el desafío. Confío en Dios que podamos estar a la altura de esta gran tarea pastoral: Evangelizar a los jóvenes.