Palabras del Pastor

Navidad, un tiempo para dar amor

Según el Obispo Diocesano, monseñor Alejandro Goic Karmelic, este es un período que recuerda la solidaridad de Jesús con los más humildes. Por ello, hizo un llamado a participar de forma concreta en las distintas campañas que existen en la Diócesis.

¿Qué podemos hacer en esta Navidad para ser más solidarios?

Navidad nos recuerda el acto de solidaridad más grande de la humanidad: cuando Dios, Señor del Cielo y la Tierra, se hace hombre en su hijo Jesucristo, naciendo en Belén y manifestándose así al mundo. Por eso Navidad es el acto de amor para con la humanidad.

Quienes celebramos Navidad, estamos invitados a tener esa actitud de amor y solidaridad con todos nuestros hermanos, especialmente, con los más pobres, los más débiles, los más vulnerables. Porque Navidad es eso, acercarse al otro respetarlo y amarlo como hermano. Justamente el nacimiento de Jesús en la pobreza de Belén, nos recuerda la solidaridad de Jesús con los más humildes, es en esa dimensión es que estamos llamados a vivir esta Navidad, a compartir lo que somos lo que tenemos con nuestros hermanos humildes, en las distintas campañas que en la región se organizan.

 

¿A qué nos llama la Iglesia en este período? ¿ cómo podemos participar de esta solidaridad?

Hay iniciativas muy concretas, que ya están en acción y que invito a la comunidad diocesana a participar. Nuestra oficina central de Caritas Diocesana, tiene la campaña “Un regalo para Jesús”, que consiste en comprar bienes no perecibles que se hacen llegar personalmente a las familias más vulnerables, en una caja navideña.

También está la campaña Misión Noche Buena, que desde hace varios años, organiza la Compañía General de Electricidad. Gran parte de esas cajas de Navidad también las entregan a las parroquias según la solicitud de los párrocos para que puedan llegar a esos hogares y compartir la alegría del nacimiento de Jesús.

Otras iniciativas surgen en parroquias y comunidades. Lo importante es hacernos presente de manera muy concreta con alguna de estas propuestas que manifiestan el espíritu profundo de Navidad, que es compartir parte de lo que tenemos y, sobre todo, compartir nuestra vida, nuestra persona con los más necesitados, humildes. Si así lo hacemos, Navidad se prolongará durante todo el año, porque durante todo el año, Dios nos invita a amar, servir y estar cerca de los que más sufren.