Con miras a lo que será su fiesta patronal el próximo mes de octubre, los fieles de la parroquia Nuestra Señora del Rosario de Litueche ya están planificando junto a su administrador parroquial, padre Alejandro Fredes Marchant lo que será esta celebración. Esta comenzará a fines de este mes de agosto, peregrinando con la imagen de la Virgen por cada una de las comunidades que forman la parroquia.

El padre Alejandro señala que  el año pasado nos acompañó el obispo diocesano en la celebración de la fiesta patronal, esperamos que este año también pueda venir, porque le hace muy bien a los fieles ver a su pastor”, asegura y agrega que “este año esperamos tener menos restricciones sanitarias para la celebración en el mes de octubre”.

El padre Alejandro lleva más de un año en Litueche, primero acompañando al padre Claudio Fuenzalida y desde el 26 de junio como administrador parroquial. Dice que durante este tiempo ha podido conocer las diferentes comunidades, de quienes destacada la solidaridad para trabajar y buena disposición a servir cada vez que se les ha pedido algo. No obstante, señala que después de dos años de pandemia, uno de los desafíos es motivar a los fieles a volver a la Iglesia y rearmar los equipos.

En ese sentido, dice que ya está funcionando el Consejo Pastoral Parroquial y en el futuro próximo se creará el Consejo Económico. En relación con las pastorales, se retomó la catequesis presencial para los jóvenes y también la confirmación para adultos. También se creó la pastoral de Liturgia; un equipo de formación, que busca prepararse para preparar a más agentes pastorales; y la pastoral de salud y consolación, formada principalmente por ministros de la comunión, está enfocada a visitar a los enfermos en las diferentes comunidades. Al mismo tiempo se continúa potenciando la pastoral de acólitos, que ya cuenta con 12 niños y niñas que ayudan en las Eucaristías. Además, se formó un equipo que llamaron Arte Attack porque su servicio es ayudar en todo lo logístico y decorativo.

El padre enfatiza que este momento la parroquia es muy activa, de hecho, a fin de mes, llegará a misionar un grupo de estudiantes de la Universidad Católica, que se organizaron para visitar las diferentes comunidades.

DESAFIOS

El padre Alejandro Fredes señaló que los desafíos de la parroquia siempre están enfocados en el ámbito pastoral. No obstante, después de las últimas lluvias, la parroquia se llovió: el techo está dañado, por lo cual ahora se está presupuestando el arreglo y viendo cómo se podrá financiar.

Relata que “recién estamos construyendo las salas de catequesis con recursos de la parroquia y habíamos pensado en el futuro ampliar la oficina parroquial, pero tendremos que ver cómo gestionar recursos para reparar la techumbre de la parroquia”. 

En el ámbito pastoral explica que se va a seguir motivando la formación de más diáconos para prestar más servicio a las comunidades; seguir potenciando la Pastoral de la Salud y Consolación, para ampliar la asistencia a los hermanos que lo necesiten y que están en sus casas; crear la Pastoral Social de Ayuda Fraterna; e incentivar la creación de grupo de Lectores de la Sagrada Escritura para proclamar las lecturas.

Por otra parte, el padre Alejandro está preocupado del ámbito juvenil y de qué ofrecerles a los jóvenes más allá de la sacramentalidad. En ese sentido, dice que es fundamental la Pastoral de Acólitos y crear Infancia Misionera para poder luego tener una Pastoral Juvenil, pese a que es complejo por la movilidad de los jóvenes. En ese sentido, dice que es fundamental tener comunidades de base para que participe toda la comunidad. “Hay mucho que hacer todavía, tenemos hartos desafíos para que todos puedan participar”, asevera. 

El sacerdote llamó a la comunidad a animarse a participar, a ser parte de la Iglesia, la idea es que la gente “se sienta acogida, porque siempre los vamos a estar esperando a todos con los brazos abiertos”. Además, pide encarecidamente que “recen por las vocaciones sacerdotales, necesitamos más sacerdotes”, asevera.