Palabras del Pastor

Obispo Ramos recuerda a Santo Cura Ars

Monseñor Fernando Ramos Pérez saludó a los sacerdotes de la diócesis y los llamó a poner la mirada en las virtudes de Santo Cura de Ars que es un ejemplo, y también en las comunidades para escucharlas, atenderlas y acompañarlas.

Monseñor, ¿Cuál es la importancia de la conmemoración de Santo Cura de Ars?

El día 4 de agosto en el calendario litúrgico de la Iglesia católica se celebra la memoria de Santo Cura de Ars, que fue un sacerdote francés, del siglo XIX, que vivió en un pequeño pueblo en Dardilly, al noroeste de LyonFrancia, y que gracias a su vida pastoral como sacerdote, mucha gente se acercó al Señor. Por eso es recordado como un Santo y su figura de santo Cura de Ars es muy importante como patrono de los párrocos y en nuestra diócesis también lo recordamos.

Monseñor, ¿Cuáles son los principales valores de Santo Cura de Ars que deberíamos tener presentes en la actualidad?

El principal valor que tiene Santo Cura de Ars es que vivió con radicalidad lo que se llama la caridad pastoral. Eso quiere decir que como cristianos estamos llamados a ser apóstoles de la caridad y del amor, manifestando el rostro de Dios y cada uno lo hace en su condición de vida.  Santo Cura de Ars vivió con plenitud y radicalidad el entregarse al Pueblo de Dios que le fue confiado en una parroquia. Toda su vida, todo su tiempo fue dedicado a la entrega de sacramentos, de confesión, de acompañamiento a las personas y lo hacía desde su condición de párroco y con espíritu de caridad y de entrega hacia los demás.

Monseñor, ¿Cuál es la relevancia en cada una de las comunidades de nuestra diócesis que exista una parroquia  y un párroco?

 

Esa es la capilaridad de la Iglesia, cada Iglesia y, especialmente en nuestra región, cada pueblo tiene una parroquia y ésta está en el centro de la vida social, cultural y religiosa de esa localidad, por lo tanto, la parroquia juega un rol muy importante en la estructuración de la vida de esa comunidad. A la cabeza de una parroquia hay un párroco, un sacerdote que se inspira en Santo Cura de Ars para ejecutar sus acciones en beneficio del pueblo de Dios. En ese sentido, son muy importantes los templos parroquiales porque es donde se conserva la memoria histórica de esa comunidad, donde las personas han sido bautizadas y también sus padres, sus abuelos, es una tradición que produce identidad. Por eso cuando tuvimos esta tragedia del terremoto de 2010, en que muchos templos fueron destruidos o profundamente dañados. De a poco se han ido restaurando y cada vez  que cada vez que se inaugura un templo surge la alegría de los habitantes porque se reencuentran con parte de su vida, de su identidad.

Monseñor, ¿Cómo los laicos podemos ayudar a los párrocos y sacerdotes a cumplir su misión?

Los laicos son muy importantes, la labor de un sacerdote está al servicio de los laicos, por lo tanto, la comunión, el diálogo, la cooperación y la fraternidad entre laicos y el sacerdote es muy importante tanto en la ayuda y el desarrollo de las actividades que se realizan en la parroquia, como en las sugerencia de lo que se puede hacer. La comunidad se enriquece a través de aportes como tiempo, en talento, y también económicamente, para que la comunidad entera pueda desarrollar sus actividades, entre laicos y en comunión con el sacerdote. Es importante la cercanía de los laicos y los párrocos.

Monseñor, ¿Cuál es su mensaje para los párrocos y los sacerdotes?

Les diría que tuviéramos la mirada en dos situaciones. En primer lugar hacia el Santo Cura de Ars, que aprendamos de él, que es un verdadero ejemplo de cómo un sacerdote puede cumplir su misión y a la vez un intercesor ante Dios. Y por otro lado, que tengamos en nuestra mirada a nuestras comunidades y a las personas que las componen para poder escucharlas, atenderlas y acompañarlas, en sus necesidades especialmente religiosas y ponernos al servicio de ellas.