Palabras del Pastor

Monseñor Juan Ignacio González llama a la prudencia y la oración

- El administrador apostólico de Rancagua, señaló que “están todos dispensados de asistir a misa”; e invitó a escucharla por radio, el teléfono, facebook u otros medios tecnológicos; o rezar el Evangelio y el Rosario.

Monseñor, usted ha realizado un llamado a la oración y la prudencia, en qué se traduce este llamado?

Como Conferencia Episcopal y también como obispos o administrador apostólico, en cada una de las diócesis, hemos dicho que un elemento esencial para el momento difícil que estamos viviendo es cumplir estrictamente las indicaciones sanitarias y las instrucciones de las autoridades del país, tanto presidenciales como ahora del Jefe de Zona en Estado de Catástrofe. Nos han recomendado  bastantes cosas, entre ellas no tener reuniones con más de 50 personas, no estar o producir aglomeraciones y, por lo mismo, se han cerrado varios lugares de reunión, entonces todas estas medidas evidentemente afectan nuestro trabajo pastoral, en un sentido, porque la Iglesia es un cuerpo vivo, somos nosotros, no es simplemente un lugar. La transmisión del Coronavirus es curiosa, no se conoce bien. Por lo tanto, la prudencia indica no contravenir la norma. En ese sentido, hemos tomado las medidas en relación a la celebración de las misas, respecto de la comunión de los enfermos, que vamos a dar algunas indicaciones más específicas, de la celebración de los funerales, de los matrimonios, porque al hacer un acto que puede ser considerado bueno, puedo estar haciendo mucho daño, especialmente a los adultos mayores. Por lo tanto, pedimos obediencia a las recomendaciones de la autoridades y sabiendo que, con la gracia de Dios, las medidas que se están tomando aquí, ralenticemos el contagio.

 

Monseñor, ¿Usted también hizo un llamado a la oración?  

La oración es como el arma del cristiano. Lo primero que hacemos en la oración es pedir la misericordia de Dios para que nos ayude a vivir conforme  a su ley y a sus mandamientos. En ese sentido, lo que estamos pidiendo es que, a través de la oración, sepamos descubrir qué dice el Señor a cada uno de nosotros en este momento. La oración puede ser mental o bocal, recomiendo a las familias la oración del Santo Rosario, a la Virgen u otras que ellos quieren. La oración mental que es encomendarse a Dios y estar en comunión con Él.  Estamos en tiempo de oración.

 

Monseñor, ¿Qué le diría a las personas que están preocupadas porque no podrán asistir a misa el domingo?

Dadas las circunstancias en que estamos, están todos dispensados de la misa. Dios nuestro Señor no se amarra a los medios ordinarios de la gracia. El tiene otras maneras. En muchas circunstancias y países pasa esto. Nosotros no tenemos la experiencia, pero pensemos en los países donde hay persecución a la Iglesia, o problemas bélicos, las personas están privadas por mucho tiempo de la misa. La Iglesia tiene la facultad de dispensar en los preceptos que ha establecido en razón de un mandamiento. El mandamiento dice santificar la fiesta. La Iglesia ha dicho, la fiesta se santifica con la celebración el día sábado o domingo en la misa. Esa ley se puede modificar por casos graves, es decir, no puede darse que por cumplir un precepto una persona haga mal a otra. Entonces pido a todos mucha tranquilidad interior, Dios conoce los corazones. Asistan a misa a través del internet, de las radios, también en facebook. Los que no puedan hacer eso, pueden rezar el rosario, leer el Evangelio, las lecturas de la misa. Que nadie se complique la conciencia o vaya a confesarse porque no pudo ir a misa el domingo.