“Hacer justicia es una parte importante del servicio de la Iglesia. Acoger con amor a los que acuden en busca de justicia es parte de la misión de la Iglesia”, señaló nuestro Obispo de Rancagua, monseñor Alejandro Goic, con motivo del cambio de vicario judical que tuvo lugar el mes de septiembre.
Debido a la renuncia de quien fuera vicario judicial, padre Augusto Rojas, se reestructuró la Vicaría Judicial, quedando a su cargo monseñor Juan Luis Ysern de Arce, obispo emérito de Ancud. Mons. Ysern estará todos los jueves en el Obispado de Rancagua para continuar con este servicio. Además, se constituyó un equipo que le ayudará compuesto por: los padres Gabriel Becerra, Héctor Pulgar, Claudio Fuenzalida y Hugo Yáñez; el diácono Francisco Badilla, la asistente social Magaly Caro y el defensor del vínculo, Miguel Campo.