La localidad de La Compañía está de fiesta, al igual que toda la sexta región, pues hoy se dedicó el templo y santuario Inmaculada Concepción, que resultó totalmente destruido en el terremoto de 2010.
Impacto causó en toda la comunidad la pila de escombros a la que quedó reducida esta emblemática iglesia construida por los jesuitas, que es parte del patrimonio, al ser monumento nacional, y por ello desde el primer momento pusieron su empeño en reconstruirla. Es así como junto a su párroco padre Aquiles Correa formaron el grupo de reconstrucción “Una Casa para María”, que estuvo presente en estos siete años que han demorado en tener nuevamente las puertas abiertas de su templo.
El proyecto, con un costo de más de mil 500 millones de pesos, fue una reconstrucción que tiene las mismas características que el templo anterior, salvo que le hicieron una ampliación de las alas laterales. Los fondos para realizar esta obra se reunieron a través de la comunidad y donantes, pero sin duda el mayor aporte lo realizó el Estado, a través del Gobierno Regional.
La ceremonia de dedicación fue presidida por el obispo de Rancagua, Alejandro Goic Karmelic, acompañado del párroco Aquiles Correa, además de números sacerdotes. También acudieron autoridades regionales, encabezadas por el intendente Pablo Silva Amaya; los senadores Juan Pablo Letelier y Alejandro García Huidobro; los diputados Ricardo Rincón y Felipe Letelier; el alcalde de Graneros, Claudio Segovia; la Seremi de Obras Públicas, Natalia Sánchez, consejeros regionales, la arquitecto Amaya Irarrázaval, y por supuesto la comunidad del sector.