Palabras del Pastor

Chile, País Mariano

Monseñor Guillermo Vera Soto, señaló que "en el hoy de nuestra historia, es importante no olvidar lo que ha significado para los chilenos la devoción a la Virgen del Carmen, es importante que hoy sepamos acudir a ella para que como buen buena madre cuide de esta nación".

Queridos hermanos y hermanas:

 A partir del año 2007, el 16 de julio es feriado nacional. El proyecto de ley aprobado por amplia mayoría en las cámaras de Diputados y Senadores, presenta como fundamento el homenaje que con ello se rinde a la Virgen, que como Madre y con el título del Carmen, ha acompañado los diversos momentos de la historia patria.

La devoción mariana llegó a Chile con los primeros conquistadores españoles. La Armada española estaba consagrada a la Virgen del Carmen, y no es de extrañar que la práctica de dicha piedad se haya difundido en tierras americanas teniendo especial arraigo en nuestro país.

Con las guerras de la Independencia, la devoción a la Virgen del Carmen adquirió una gran fuerza y se transformó en un símbolo cívico-religioso de alcance nacional. Desde aquellos tiempos se le saluda como Madre de nuestra nación; su culto se extendió y su figura quedó para siempre asociada a nuestro patriotismo y ligada al destino del país. El nacimiento de la patria independiente se adjudicó a la acción intercesora de María bajo la advocación del Carmen.

Si la Independencia había representado su primer momento de devoción nacional a la Patrona, el segundo gran momento  fue durante la Guerra del Pacífico. Una vez terminada esta guerra, el 14 de marzo de 1881, el General Manuel Baquedano concurrió ante la imagen del Carmen y colocó su espada victoriosa en sus manos, ante las aclamaciones de una gran multitud. Igualmente, durante la revolución de 1891, monseñor Ángel Jara (autor de la bella oración a la Virgen del Carmen) convocó a los habitantes de Santiago a postrarse delante de su Patrona e implorar la paz.

Se venera a la Virgen del Carmen como Patrona de Chile, oficialmente desde el 24 de octubre de 1923, por decreto Vaticano emitido por el Papa Pío XI. Tres años después en una magna concentración de fe y amor, la hermosa imagen de la Virgen, que hoy es custodiada en la parroquia de El Sagrario junto a la Catedral de Santiago, fue coronada en  el Parque Cousiño, hoy Parque O’Higgins, como Reina de esta Nación.

En el hoy de nuestra historia, es importante no olvidar lo que ha significado para los chilenos la devoción a la Virgen del Carmen, es importante que hoy sepamos acudir a ella para que como buen buena madre cuide de esta nación; y, con sus ruegos y protección, los hijos e hijas de esta tierra procuremos, en un ambiente fraterno, trabajar por su progreso, el cual será verdadero si no olvidamos nuestras raíces cristianas, que hagan que los valores y enseñanzas del Evangelio, estén presentes entre nosotros.

Hemos vivido esta fiesta en honor de la Virgen del Carmen. Muchas de nuestras parroquias y comunidades la tienen a ella como celestial patrona. En todos los lugares de culto se ha honrado a la Virgen  con su Novena, celebrando la procesión y actos de culto e incluso en nuestras familias las hemos invocado con cariño. Así como Chile siempre ha acudido a su madre, hoy continuemos haciéndolo.

¡Virgen del Carmen, Reina de Chile, salva a tu pueblo que clama por ti!

 + Guillermo Vera Soto

Obispo de Rancagua