Actualidad Diocesana

Joven rancagüino inicia camino hacia el sacerdocio

Jueves 07 de Marzo del 2019
- El arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati presidió la misa de ingreso de los nuevos seminaristas.

El joven Francisco Méndez Pinto, de la Parroquia Santísima Trinidad de Rancagua, junto a otros seis jóvenes de Santiago comenzó su formación y discernimiento como candidato al sacerdocio en el Seminario Pontificio Mayor de Santiago, con una Eucaristía presidida por el arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, el pasado domingo 3 de marzo.

También estuvieron presentes en la celebración, el obispo auxiliar de Santiago, Cristián Roncagliolo Pacheco; el rector del Seminario Pontificio, Cristian Castro Toovey; y los sacerdotes Cristian Giadach y Héctor Pulgar, de nuestra Diócesis de Rancagua, quienes quisieron acompañar al joven rancagüino. Además, del diácono Jorge Martínez y numerosos amigos.  

En la oportunidad, monseñor Ezzati destacó  tres dimensiones que debieran estar presentes en el horizonte del proceso formativo de los jóvenes. En primer lugar, el  “Vengan conmigo”, referido a caminar con Cristo y hacer propio su estilo de vida y misión.

En segundo lugar, el “Síganme”, refiriéndose a que el cristianismo no es un doctrina, sino caminar tras las huellas de Cristo y estar con Él, y por último, el yo haré de ustedes pescadores de hombres”, animándolos a dejarse formar por el Buen Pastor.

Finalmente el obispo les recordó a los jóvenes que el camino que decidieron emprender puede tener momentos difíciles y que “no se trata de un tiempo de espera, sino de intenso trabajo. A partir de hoy están llamados a construir su mejor respuesta al sublime llamado de Jesús. No les faltarán momentos de dudas, de tempestad, de miedo, pero tampoco les faltará  su presencia y su mano tendida”.

El joven de la Diócesis de Rancagua que aceptó el desafío de seguir a Cristo es Francisco Méndez Pinto, joven de 21 años y el mayor de tres hermanos. Sus padres son  Janette Pinto y Daniel Méndez.

El pertenece a la Parroquia Santísima Trinidad de Rancagua, estudió  en la Escuela Agrícola San Vicente de Paul y su camino hacia Jesús comenzó hace unos años en una Misión en la localidad de Maullín.

“Fue durante esta misión, relató Francisco Méndez, que me di cuenta que la gente sufría con sus problemas familiares y sentí que Dios quería que yo fuera consuelo para ellos. En ese momento surgió en mi corazón la pregunta ¿por qué no seguir a Cristo de una manera diferente?”

“Mi proceso de discernimiento y maduración ha sido bastante hermoso y difícil a la vez, a través de la oración personal y comunitaria; participando en jornadas vocacionales y dejándome acompañar he podido conocerme y entender la voluntad de Dios. Hoy puedo decir que Dios con su infinita bondad me miró con mucha misericordia y me eligió para ser su siervo”, dijo Francisco Méndez.