Palabras del Pastor

Obispo de Rancagua llama a vivir Miércoles de Ceniza

• Monseñor Alejandro Goic Karmelic explicó que con esta celebración comienza un intenso tiempo litúrgico que culmina con la Pascua de Resurrección.

Monseñor,  el 5 marzo es Miércoles de Ceniza, ¿Qué se celebra en esta fecha?

Con el Miércoles de Ceniza la Iglesia inaugura un tiempo litúrgico de una gran densidad espiritual. Son los 40 días de preparación, previos a la Semana Santa, que comienza con el Domingo de Ramos y culmina con la Pascua de Resurrección. Son días en que la Iglesia invita a todos sus hijos a una mayor intensidad de oración, mayor solidaridad con los más pobres y los que sufren, y también a una privación de las cosas superfluas para compartirlas con los más sufrientes. Éstas son las tres obras clásicas para este tiempo, porque la Iglesia quiere que celebremos cada año de forma renovada el misterio de la Muerte y Resurrección de Jesús, para que podamos decir que, verdaderamente, al celebrar la fiesta mayor, como es la Resurrección también nosotros todos resucitemos a una vida de más fe, amor y mayor compromiso con los demás. Por lo tanto, es un tiempo fuerte de espiritualidad, lo que llamamos la Santa Cuaresma.

 

Monseñor, ¿la Cuaresma de Fraternidad en qué consiste?

Justamente como una de las obras clásicas es la preocupación por los más pobres y los que sufren, la Iglesia de Chile, hace ya cuatro décadas, organiza lo que se llama la Cuaresma de Fraternidad, es decir, que fruto de las privaciones voluntarias por amor al Señor y a los hermanos, la vayamos conservando en alcancías y cajas especiales que el día de Pascua de Resurrección se entregan como ofrenda en la misa, y con todo lo que se recauda se realizan proyectos a nivel regional y nacional de servicio, en este caso a los pobres más vulnerables y de las distintas formas de sufrimientos que a veces padecen nuestros jóvenes.  Entonces la Cuaresma de Fraternidad es una acción concreta de solidaridad, fruto justamente de este espíritu de Cuaresma, de conversión y de pensar en quiénes más lo necesitan, para realizar acciones solidarias, de amor concreto y de servicio a los demás, que en este caso serán los niños en situación de riesgo social.

 

¿Cómo colaborar?

Las formas concretas de colaborar monetariamente con esta campaña son cuatro: a través de las alcancías que entregan las parroquias, por medio de sobres que se distribuyen en colegios, aportando en las cajas o alcancías grandes ubicas en el comercio, empresas y establecimientos educacionales y, finalmente, a través de depósitos en la Cuenta Corriente del Banco Estado N° 187593. Para transferencias electrónicas se debe utilizar el Rut: 70.004.880-2 y los depósitos deben confirmarse